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viernes, 14 de septiembre de 2012

Historia terrorista, Ley de negacionismo ... y después de la guerra qué?

Coincidentemente, acabé de leer Abril Rojo (de Santigao Roncagliolo), con su interesante narrativa que atrapa, una mirada de como personajes ficticios representan a los verdaderos que vivieron la historia de guerra terrorista y se van transformando innevitablemente por la influciencia de ese terror y la carencia de soluciones posibles.

Luego, recibí una nota de Jefrey Gamarra -docente de la UNSCH- en el que refiere que los que hemos vivido el periodo terrorista de los 80´s nos hacemos -en este tiempo, 2012- nuevas víctimas de otra guerra de racismo e intolerancia. El articulo completo sobre la Ley del Negacionismo y los ayacuchanos se puede acceder ver aquí. Jefrey lo explica a partir de una interpretación del articulo 316-4 del Código penal que está en proceso de aprobación, la nota esta publicada en El Comercio del 28 de agosto 2012, más aquí.

Jefrey dice en su interpretación  que "Los ayacuchanos que han vivido el conflicto armado interno, aquellos que en el momento mismo de la violencia tuvieron que actuar de manera diferente sea por temor o estrategia de supervivencia o simplemente por una identificación al inicio del conflicto con utopías de transformación social, corren un serio riesgo de sufrir las consecuencias de la aplicación del articulo 316-4 del Código Penal o ley de negacionismo. Pero no solamente ellos, también quienes pertenecen a una generación posterior que, sin haber vivido directamente los sucesos, por una cuestión de transmisión de memoria entre generaciones pueden sufrir tambien las consecuencias de la aplicación de este artículo"

El remate, pronto se estrenará "El Rincón de los Inocentes" para ver el trailer haz clic  aquí. Casi como un recordatorio de la reciente historia de ésta guerra que pasó Ayacucho.

De hecho, en una guerra las consecuencias del caos que se vive en ella afectan directamente las responsabilidades, las  confunden, hacia limites oscuros, frustrantes y una evidente impotencia por no poder resolverlas, como en el caso de la niña muerta en la incursión de Junin, en ese caso, los ministros disque van a investigar aquí, ojalá encuentren y reconozcan la responsabilidad y si deben hacer un "mea culpa" lo acepten.

Pienso que, el estado está tomando medidas desesperadas y apresuradas para controlar o  mínimamente reprimir brotes de terrorismo, no sería mejor tomar otras acciones?. Porque los ayacuchanos no somos "ignorantes", a fin de cuantas la gente, la población, los peruanos no reaccionamos como reaccionamos por placer de violencia (ojo con esto no justifico que haya sido buena la violencia terrorista), en realidad hay razones civiles, sociales y ciudadanas que nos motivarán siempre a la protesta, más aún cuando no hay estrategias eficientes de desarrollo ecónómico, social y sobre todo que se apliquen localmente.

Recordar, comprender y analizar nuestra historia, es bueno mientras nos permita corregir y enderezar decisiones, reflexionando puedo comprender ahora también a mis hermanos ayacuchanos - comenzando por mi propia familia, mayores y contemporáneos mios. Nuestra espectativa debe ser más bien, observar que nuestra sociedad al menos corrija sus errores y si podemos corregir los nuestros (los personales), pues comencemos desde nosotros y nuestras vidas!!, la historia de la guerra no debe repetirse, como tampoco debe repertirse la impunidad y la desidia del estado.

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